MANOLO EL DEL BOMBO (futbol)

Una vida por el futbol, Manolo el del Bombo

Manolo es el dueño del bar El Museo del Deporte de Manolo el del Bombo, situado frente al estadio de Mestalla. En sus paredes, las fotografías y otros objetos resumen una vida dedicada al fútbol. Una foto muestra la familia de Manolo, que le abandonaría en 1982 cansada de un futbol que les arruinaba. Los primeros viajes haciendo autostop fueron muy duros y Manuel Cáceres confiesa haber “llorado mucho”. Pero ahora, Manolo es un hombre sonriente, amable, y al que le gusta compartir una vida dedicada al futbol como la suya.

El famoso aficionado español se encontraba sin dinero ni trabajo tras el mundial de España de 1982. En el peor momento, una ambulancia con un muerto le cambió la vida cuando se paró en Alicante para llevarle hacia Valencia. Aquí conoció al dueño de una sala de fiestas que le dio trabajo, y que más tarde, le ayudó a abrir su bar. Manolo desea llegar a conocer algún día a la familia del muerto que “le cambió la vida” como dice él.

El futbol le ha permitido recibir “el cariño de mucha gente y saludar a muchas autoridades”, comenta Manolo. Su relación con los periodistas excelentes, “sobretodo, con José Ramón de la Morena”, dice el seguidor español. Entre las autoridades, destaca cuando regaló “un balón y una camiseta de la selección al Príncipe Felipe, a la Princesa Letizia y a la Infanta Leonor”, recuerda. El famoso seguidor ha protagonizado diferentes anuncios, uno tan curioso como grabar un spot para la televisión polaca en tierras africanas.

De todos los partidos que ha vivido, destaca la Recopa de Europa ganada por el Valencia ante el Arsenal inglés en 1980, como “el peor partido de mi vida”, sus ojos que se vuelven tristes describen a la perfección sus palabras. “Los ingleses nos pincharon con navajas y tiraron botellazos” narra Manolo. Por su parte, lo mejor ha sido “el cariño de la gente” confiesa orgulloso de ese gran afecto, y cabe decir que merecido para un hombre que te invita a poco de conocerle a unas papas y un refresco.

Visité a Manolo en su bar en Mayo del 2006 para elaborar una entrevista para un diario universitario, de la cual he extraído los principales fragmentos de este texto. En ese instante Manolo estaba muy ilusionado y confiaba que Alemania fuese el lugar donde España acariciara el éxito después de tantos fracasos, pero en el mundial que tuvo lugar ese verano su sueño no se convirtió en realidad. Ahora, dos años después su sueño es un hecho, España es campeona. La historia reciente de la campeona de Europa de futbol se define en las paredes de ese bar, por fin todas sus fotografías no son de historias de sueños rotos, un gran regalo para un gran ser humano, Manolo el del Bombo, un apasionado del futbol.